Propuestas puesta en común encuentro hermandades

PROPUESTAS PARA PONER EN COMÚN EN EL ENCUENTRO

1.- ¿Qué celebraciones realiza la Hermandad, durante el año, con el fin de promover el culto público y la devoción a San Benito Abad?
R.- Aparte de las celebraciones o actos oficiales,(Vigilia, Jueves de Lucimiento, Romería y Onomástica). La hermandad tiene establecido un calendario de actividades de carácter espiritual y social. Bien es cierto que a pesar de el arraigo y la devoción que todos procesamos a S. Benito, no contamos con una asistencia masiva salvo en algunas excepciones, no siendo está situación un motivo de desanimo en ningún caso. Tenemos muy claro que ese es el principal fin de la hermandad y es nuestra obligación llevarlo a cabo. Enumeramos las actividades que están recogidas:
ESPIRITUAL.- Retiros, oraciones, formación, convivencias en santuario. Relaciones con hermandades de penitencia, Arciprestazgo, Obispado, Caritas y entidades solidarias.
SOCIAL.- Actividades participativas, (infantiles, jóvenes y mayores), visitas a enfermos etc. Relación con tipo de instituciones, (Colegios, Ayuntamiento, Universidad, Museos, etc). Todo ello enmarcado en la perspectiva de la Obra de San Benito como persona de iniciativa e inquietud para facilitar en la medida de lo posible la vida diaria de las personas necesitadas.

2.- ¿Qué se puede realizar, o cómo se puede mejorar lo que ya se realiza, para que los herman@s de la Hermandad se relacionen entre ellos y vivan su “ser hermanos” como algo más que pagar una cuota sin compromiso?
R.-El convencimiento personal de las personas que representan a la hermandad en este sentido es lo prioritario. Aparte de las actividades que se puedan llevar a cabo, es fundamental predicar con el ejemplo y eso es difícil llevar a efecto si no hay una J.G. implicado en el apartado espiritual, ya que este deriva de forma paralela en el social. Después de la experiencia adquirida en estos dos años, en los que no hemos cesado en este tipo de intentos, bien es cierto que hay un grupo de hermanos que siempre están dispuestos pero la gran mayoría son totalmente ajenos al funcionamiento de la hermandad, se limitan en exclusiva a vivir las celebraciones. En este apartado necesitamos ayuda e ideas para poner en práctica.

3.- ¿Tiene previsto la Junta de Gobierno buscar espacios para una formación cristiana con la pretensión de conocer más nuestra fe y así poder crecer día a día en el apostolado?
R.-Al respecto nuestra hermandad a llevado a cabo en los dos años anteriores un Curso de Formación con esa pretensión y bajo la perspectiva de la vida y obra de San Benito. Una vez terminados, surgió por parte de los asistentes la necesidad de aportar ideas y realizar acciones en beneficio de la comunidad, como forma palpable de ejercer el apostolado y de poner en práctica la palabra de Dios. Las conclusiones fueron demoledoras; las pérdidas de valores, la falta de aplicación en el ejercicio de la caridad, la nula comprensión con los necesitados. Nos están llevando a una aptitud individualista y despreocupada del ser humano con el entorno más cercano. Dando prioridad a todo lo material y efímero como forma de satisfacer el yo personal y dejando para mejor ocasión todo lo que implique compromiso y ofrecimiento a compartir con los que necesiten algún tipo de ayuda.
Valorando la necesidades del entorno, este grupo de personas han puesto en funcionamiento dos actividades:
– Aula de Formación de Padres.
– Aula de Formación de Mayores.

4.- ¿Qué lugar ocupan, en nuestras actividades de Hermandad, aquellas que se refieren a la formación y a la cultura?
R.- Cultura: Aqui tenemos un amplio repertorio que cultivar, el patrimonio cultural es considerable en dos vertientes; histórico y tradicional. El lugar que ocupa es prioritario conjuntamente con el espiritual e institucional. No en vano deberíamos prestar más atención a lo que es la cultura en general, quizás en este apartado nos limitamos a lo que nos afecta o emana de nuestra hermandad, no teniendo en cuenta el amplio campo de acción que está actividad genera y las repercusiones positivas que conlleva.
– Formación: Es un apartado que requiere de medios y que procuramos de aportarlos con colaboradores y los propios miembros de J.G., que le dedicamos el máximo interés a niños y jóvenes. Para estos tenemos un calendario de actividades que nos resulta difícil de llevar a cabo ya que no termina de cuajar la sección, hay que dedicarle demasiado tiempo desde la hermandad y eso no siempre es posible. Seria conveniente recibir ayuda especializada ya que no conseguimos su implicación, salvo de un grupo muy reducido. Con los niños tenemos una agenda muy completa y de momento creo que lo llevamos bien. La hermandad realiza una semana completa en el colegio donde se comparte con ellos desde todos los estamentos, se hacen peregrinaciones a la ermita y muchos fines de semana se preparan actividades para ellos en La Casa Hermandad.

5.- ¿Con que actividades la Hermandad cumple el fin caritativo – social de atención a los más desfavorecidos y necesitados dentro y fuera de nuestras fronteras de los hermanos?
R.-Todas las colectas que se realizan en las misas de la ermita, se entregan a la parroquia para que lo empleen en este tipo de atenciones. Creemos que es una aportación muy generosa.
– Se realizan actividades tanto con discapacitados como con mayores.
– Se hace una aportación a todas las campañas que promueve La Parroquia, a nivel local o de La Diócesis.
– Desde el área espiritual, se contempla la visita a enfermos.
– El Prioste acompaña a los mayordomos, en la visita a los enfermos.

6.- ¿Hay relación en el ejercicio de la Caridad con Asociaciones o Instituciones de fines sociales, ONG, Caritas, trabajadores sociales, Concejalía de Asuntos Sociales… etc?
R.-La hermandad colabora y participa con la asociación de discapacitados de nuestro pueblo en la organización de actividades; de distracción y de ocio. Y con Caritas tenemos un relación estrecha y participamos en cuantas acciones nos pide colaboración.

7.- ¿Están presentes los jóvenes en la Hermandad?, ¿cómo participan?. Si no lo están, ¿cómo atraerlos?
R.-Ya comentamos en la cuarta pregunta lo referente a los jóvenes. Salvo un grupo muy reducido; no están presentes, no participan y creo que necesitamos ayuda especializada para atraerlos.

8.- Cómo es la relación de la Hermandad con la Parroquia, con el Párroco, con los demás grupos parroquiales y con el resto de las Hermandades.
R.-Es intensa y con plena disposición a cuantas llamadas nos realizan, bien sea para reuniones, petición de instalaciones o organización de actividades conjuntas. No puede ni debe ser de otra forma, ya que el destino nos une a todos en el mismo objetivo.

9.- Cómo son la relaciones de la Hermandad con las autoridades civiles: Ayuntamiento, Guardia Civil, Protección Civil, Delegación de Gobernación ( Plan Romero).
R.-Son estrechas y cordiales. Sobre todo en las celebraciones de Vigilia y Romería necesitamos de una coordinación unificada para asegurar el buen desarrollo de las peregrinaciones y la aplicación del Plan Romero en toda su extensión. En este apartado debemos reconocer un cambio profundo en los últimos años, debido a la aplicación de la normativa actual en al apartado organizativo y de ordenación del Recinto Romero: acampada, aparcamientos, recogida de residuo, prestación de servicios ( seguridad, sanidad y servicio de aguas). La hermandad no dispone de los medios ni recursos necesario para su aplicación, convirtiéndose la situación actual en gestiones propias de un Ayuntamiento y llevando a la J.G. a situaciones extremas a la hora de aplicar el Plan Romero, ya que los hábitos adquiridos de libertad de acción de todos los usuarios, suponen una posición frontal a lo que debemos implantar.
Sobre este aspecto, decir que una J.G. no debería de dedicarse a este tipo de gestiones, ya que su verdadera misión está en los fines de la hermandad. En este apartado hay mucho que hablar si la dimensión de Vigilia y Romería se mantienen al mismo nivel los próximos años. Ya que la hermandad no está capacitada para asumir ese tipo de responsabilidades, sin medios ni recursos propios. Y mucho menos los hermanos que puntualmente ejerzan cargos de gobierno puedan soportar, tanta dedicación.

10.- ¿Qué luces y sombras tiene la Hermandad?
R.- Luces: – En el apartado espiritual, la devoción quizás no esté bien encauzada, en algunos casos de forma desordenada y sin un argumento consistente, ya que se antepone de forma muy común; S.B. a Dios, esto demuestra la ignorancia existente. No cabe duda que dicha devoción está muy ligada al recuerdo y a las vivencias del individuo.
– Tenemos una masa social importante y ese es el recurso más preciado para cimentar un futuro que se aproxime a una realidad, que no debe ser impuesta pero si comprendida. Como en otros casos, la J.G. tiene un trabajo complejo para sensibilizar y dar a conocer el porqué es tan importante conjugar la alegría y lo festivo, con el compromiso y la fe.
– De lo tradicional. Aqui es donde el potencial quizás nos desborde, no es cuestión de comerciar con él, ni de ser reacios a su divulgación. Aunque después de las experiencias vividas, si tenemos que asegurarnos muy mucho antes de comprometernos a apariciones en el exterior. El valor del traje de jamugueras, lo exclusivo de enseres y joyas y un sin fin de prendas y de utensilios, tanto en la mujer como en el hombre. Conforman un compendio inigualable, como así lo califico Pedro Cantero, etnólogo de reconocido prestigio. Calificando nuestra romería, como la más peculiar de todas las que se celebran en la provincia de Huelva.
– De lo histórico. Tres fechas claves: 1435, primera referencia documentada a la ermita de S.B.; 1595, constitución de la hermandad y 1667, El Cabildo de El Cerro de Andevalo, nombra Patrón de la localidad a San Benito Abad. Los periodos entre estas fechas a nuestros días, son de una magnitud histórica a prueba de los investigadores más exigentes, acogiendo en su trayectoria la vida de nuestro pueblo y la de todo su entorno.
Si es cierto, que nos hemos desarrollado culturalmente a un buen nivel en los últimos 30 años ya que el patrimonio así lo exige. Pero creo que tenemos argumentos suficientes para aumentar el calendario cultural y a la vez debemos tener en cuenta que las personas que estén al frente de la hermandad deben tener unos conocimientos profundos, aparte de una buena formación, ya que la magnitud y dimensión adquirida lleva consigo este añadido. Está claro que no todos podemos ocupar cargos de relevancia, ya que las exigencias institucionales así lo requieren y en muchos casos hay que estar a la altura para representar en la medida que nos corresponde.

Sombras: -Es evidente que el apartado económico es fundamental. Lo que no es moral ni ético, es que este haya copado la mayor parte del organigrama y funcionamiento de la hermandad.
– De 1500 hermanos, el 70% son hermanos de cuotas. No participan.
– Mucha vanidad y exterior y muy poco compromiso e interior.
– Las exigencias son cada vez más, el desconocimiento de la norma no exime de su cumplimiento, los hermanos no quieren orden ni concierto, quieren libertad y campar a sus anchas y esto supone un desencuentro entre estos y J.G., con el consiguiente malestar que ocasiona.
– Tanto en el cumplimiento del Reglamento como del R.I., en casos se aprovechan de forma flagrante de la generosidad que derrocha la hermandad, ya que al ser religiosa con todas las virtudes que moralmente conlleva eso, se procura ser flexible y acoger a todos sin distinción. No se es estricto y la manga es tan ancha que volver atrás va a suponer un verdadero trastorno afectivo y de relación entre los hermanos. Ejemplos:
a) Controlar Peñas; hermanos y el cumplimientos de estos de la norma. No olvidemos que las casas son de la hermandad.
b) La cantidad de hermanos de alta anual, es abrumadora, pero el compromiso y el desconocimiento es abusivo.
c) La falta de respeto a las decisiones de J.G.. En este aspecto, la organización tanto de comitivas como del Recinto Romero son el principal exponente.
– Históricamente hemos tenido un entorno rico e implicado, hablo de los pueblos limítrofes que siempre participaron de este evento. Actualmente esa cercanía se ha perdido y muy posiblemente sea para siempre. No entro a valorar causas, pero si podemos asegurar que las consecuencias han sido negativas. Si queda algún atisbo de lo que fue, eso se lo debemos a los mayores, los jóvenes de esos pueblos están totalmente desvinculados. No olvidemos que siempre fueron las personas del campo cercano al santuario, las que perseveraron en el tiempo por encima de mucho momentos difíciles, para que haya llegado a nuestros días esta joya que disfrutamos. Y de ellas muchos fueron de las localidades del entorno.

11.- ¿Qué futuro se entrevé?
R.- Hay una expresión muy común,» San Benito ha estado ahí toda la vida», esto da a entender, que todo ha sucedido por sí solo y que las personas tanto en la gestión como en el día a día no significan mucho. Quizás a pesar de mi optimismo como condición personal, soy algo escéptico en cuanto al futuro de la hermandad. Intuyo que al igual que los valores morales que promueve la fe católica han dejado de ser lo predominante en nuestros días, hemos tomando una deriva facilona y carente del verdadero mensaje que debe abanderar a nuestra hermandad.
-Otra expresión es; » Con 400 años a las espaldas, ya está todo inventado». Cuando todo se mueve de forma sistemática los cambios producen desencuentro y opiniones en contra de los que proponen. A veces estos cambio vienen impuestos del exterior, bien sea por la deriva que acarrea el progreso, o bien, por la aplicación de normas civiles que son de obligado cumplimiento. Dichas circunstancias en cierto modo afectan al funcionamiento de la hermandad y no se pueden evitar, de ahí que sea necesario la adaptación del R. Interno al momento actual y la inclusión de apartados que no se habían tenido en cuanta anteriormente.
– No puedo olvidar dando un repaso a la historia de la hermandad, la diversidad de situaciones difíciles que ha tenido que superar, utilizando argumentos más o menos ortodoxos para superarlos, pero que han supuesto una salida adelante. Por lo tanto debemos tirar de optimismo y mirar al pasado y al futuro a la vez, para procurar de evitar todos los errores posibles. Los pasos en firme se dan cuando se ha explorado bien el terreno, debemos tirar de coherencia y sentido común y dejar a un lado posturas inflexibles.
En otras ocasiones que me he implicado socialmente, me desengañe de mi intento de cambiar lo establecido, creo que nos gusta estar aborregados y tomar la deriva menos comprometida. La parte cómoda de estar, pero no estoy, la hemos aprendido rápido y eso nos ha llevado a un desarraigo y a una dependencia muy elevada de la ley del mínimo esfuerzo. Lo cual va en detrimento no ya del individuo en sí, sino de nuestra sociedad en general. Esta es mi opinión que puede ser más o menos acertada, basada en demasiados años de compromiso social de forma desinteresada. Puedo asegurar que cuando una situación se establece y acomoda al ser humano, es difícil luchar contra ella. Como creyentes, es nuestra obligación de al menos seguir predicando con el ejemplo, esperemos que los hechos que realizamos sean muy evidentes para aclarar todas las dudas posibles.

12.- ¿Hay algún proyecto de futuro que podríamos realizar las hermandades que nos reunimos teniendo como hilo de unión la figura, persona y obra S. Benito?.
– Proyecto común de evangelización teniendo como base las ocho reglas escritas por San Benito, como normas básicas de funcionamiento en la vida monacal. El análisis de estas reglas podría suponer una inyección de aire freso, al menos para las personas que están ocupando cargos en J.G., y de paso para todos los hermanos que lo deseen. De aqui podría salir un grupo de personas que coordinen, para dar forma a una asociación de hermandades de advocación benedictina , con este objetivo inicial y con el futuro abierto a lo que el devenir pueda demandar.
– En cuanto a Caridad y Obra Social. Creo que ya las hermandades que participan en el encuentro, tienen contemplado este tipo de actividades y las llevan a cabo en su entorno. Hay que tener en cuenta que para las personas que estamos en los pueblos, es muy complicado de comprometernos con proyectos alejados, a no ser que sean coordinados por entidades de un ámbito mayor (Caritas, Obispado, etc.)